miércoles, 30 de septiembre de 2009

...Del miedo a la ausencia.



... Creo que todos, o al menos la mayoría de nosotros, hemos pasado por ese lapso, que parece ser sacado de una película, de esas que la gente ve una y otra vez, donde el amor vence al odio, al tiempo, a la realidad y a la distancia. Una de esas películas, en las cuales el héroe vence, al enemigo,y sale con la princesa en brazos...

...Uno de esos momentos en que encontramos "estabilidad" (...púes eso es lo que es) con una persona, en un trabajo, en un equipo o simplemente, con nosotros mismos. Y vaya que es raro eh? Creer, encontrar a esa persona para toda nuestra vida, o un lugar perfecto en tiempo, y espacio, donde creemos "estar bien"...

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...Y después viene la parte "real". La escena en que el héroe, o la heroína, caen vencidos por sus propios miedos, por sus propios ideales torcidos, ó... en la mayoría de las veces... por su incapacidad de salir de un círculo de comodidad. Pero en nuestra vida, el héroe no saldrá de ese momento, de un día para otro...

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...Saldrá, cuando se de cuenta, de que para poder encontrar, el equilibrio real y adecuado, debe aprender a encontrarlo, primeramente, dentro de el mismo. Más allá de lo que la gente pueda esperar de él, e incluso más alla de lo que, su vida, le dicte hacer, como procedimiento mecánico. ¿Cómo?... Es fácil, sabiendo y aceptando la derrota, en un aspecto de los miles que la vida nos puede obsequiar... enfrentando la catarsis, de las situaciones.

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...Finalmente, y contrario al dicho de "solos nacemos, solos morimos...", me atrevo a comentar uno nuevo, y más real, en base a la experiencia adquirida...

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..."Solo nosotros, jamás nos abandonaremos."

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...No es el miedo a afrontar lo perdido. Sino aquel que se refiere a la "ausencia" de lo que erróneamente, creémos debe estar.

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